29 junio 2008

¿Chicas materiales? Sí, pero muy amistosas

Sex & the city -el film basado en la popular serie del mismo nombre- ya se estrenó en nuestro país. Por más fanatismo que este film despierte en sus fervientes seguidoras, no creo que se trate de una película que hará historia en el cine, como sostuvo la protagonista y coproductora Sarah Jessica Parker. Sin embargo, para aquellos y aquellas -los primeros en especial- que dicen que ver esta película es una perdida de tiempo, que abunda en superficialidades y demás, les pido que lean a continuación, quizás cambien de opinión. Creo que la razón del rechazo es simple, no entendieron el objetivo del film: entretener. Lejos están estas 4 mujeres de ser el prototipo de la mujer involucrada con la política, la economía o en las causas por el bien común; no se trata de un grupo de chicas dedicadas a tener charlas filosóficas acerca de Sartre o Marx, sino de un tema más terrenal y directo, el sexo. Bueno, Samantha idolatra al botox por sobre cualquier otra cosa, ¿y qué? ¿acaso no es un uso extendido en la sociedad de hoy? Sí, a Carrie le preocupa el tamaño de su guardarropas más que el de la cocina,¿qué problema hay con eso? Admito que hay una superabundancia de marcas como Coty, Vitaminwater, o Sky Vodka, pero... ¿acaso en el Náufrago no aparece "fedex" hasta en la sopa del protagonista?, ¿tiene más derecho James Bond a usar un auto de alta gama distinto en cada película, que Samantha de andar en un Mercedes Benz?Creo que lo más rescatable de la película, más allá del mensaje "el verdadero amor siempre triunfará", se puede apreciar en los primeros minutos de la misma: cuartetos de amigas alegres (aparte de las 4 protagonistas) paseando de día y de noche por las calles de Nueva York. Porque como dice Carrie: "la vida no es siempre como tus fantasías, por eso necesitas amigas de verdad que te ayuden a poner los pies sobre la tierra". Quizás se les fue un poco la mano con las fantasías, pero creo que más de una coincidirá en que esta frase es muy cierta.